Tema central de la prensa del viernes es el Presupuesto Público para 2017, aprobado ayer. El diario Sega enfatiza en que “a pesar del referendo, los partidos políticos han conservado sus cuantiosos subsidios” y por cada voto efectivo el subsidio estatal seguirá siendo del orden de 5,5 euros y no bajará a 50 céntimos del euro. Con idéntico motivo, el rotativo Trud informa que “Los diputados han amordazado la voz del pueblo”. Por su parte, el periódico socialista Duma destaca que “Por medio de fintas sórdidas, falsificaciones y transgresiones del reglamento del Parlamento los diputados por el partido GERB han hecho fracasar la propuesta de incorporar a la ley para el Presupuesto 2017, 5 millones de euros complementarios para la Academia de Ciencias de Bulgaria y 250 mil euros para la Universidad de Sofía “San Clemente de Ohrid”.

En escrito en primera plana, el rotativo 24 Chasa asegura que las elecciones la próxima primavera no se celebrarán conforme el sistema mayoritario, al menos según el partido GERB. En entrevista para este rotativo, Danail Kirilov, jefe de la Comisión Jurídica del Parlamento, expresa que los cambios, a raíz de los cuales será posible implementar la elección mayoritaria de los diputados, no podrán ser aprobados a tiempo para servir en las elecciones anticipadas. El primer problema residiría en la exigencia de la Comisión Veneciana de no hacer cambios sustanciales de las reglas electorales en el año de las elecciones y, el segundo, que nadie promueve un proyecto de enmiendas al sistema electoral. En escrito en su primera plana, el periódico Sega informa que en un tramo de 200 kilómetros de la frontera de Bulgaria y Turquía no hay cámaras de video vigilancia. La publicación cita una declaración de Filip Gunev, viceministro del Interior, quien señala que en el amotinado recientemente campo de refugiados de Jármanli ,el Ministerio del Interior ha descubierto gran número de extranjeros que se habían auto alojado en el mismo. Además, frecuentemente, intentaban entrar en este cambio también traficantes de migrantes.

Titulando “El balón que conviene a todos”, el diario Capital asegura que los partidos políticos van acumulando dividendos baratos pero peligrosos mientras atizan “la crisis migratoria”. Las fuerzas políticas principales se benefician preelectoralmente de dividendos a corto plazo, del consenso que mantienen sobre la amenaza más grave para el país y de los ánimos públicos, exacerbados a máximo, contra los refugiados. No obstante, el efecto perjudicial ya se habría vuelto visible y toda decisión tendente a paliar el problema, tanto para las autoridades como para las personas residentes en proximidad a los centros de alojamiento de refugiados, resulta inaceptable ya desde el momento de ser proferida. Sembrar miedo sería algo que beneficiaría a todos: la oposición tendría así motivo para criticar a los gobernantes por su política respecto a los migrantes, y los gobernantes contaría con la oportunidad de jactarse de haber obtenido de la UE millones de euros para financiar el control fronterizo. Sin embargo, la creación de un umbral público que convenga a todos los partidos políticos reduce fuertemente las posibilidades de que Bulgaria mantenga una política adecuada como país miembro de la UE.

Seleccionado por Stoimen Pavlov
Versión en español por Mijail Mijailov