Una quincena de días después de las elecciones parlamentarias anticipadas en Bulgaria, no se celebran todavía unas negociaciones auténticas sobre la formación del nuevo gobierno sino conversaciones a nivel de expertos en torno a un programa de gobierno común. No obstante, en la semana que termina se han perfilado algunas cosas importantes. Al más alto nivel político entre el partido GERB y la coalición nacionalista “Patriotas Unidos” se puso rumbo a la creación de una coalición gobernante entre ellos. Las dos formaciones acordaron que el nuevo gobierno disponga de un mandato claro de 4 años y sea encabezado por Boiko Borisov. A esta etapa resulta evidente que el flamante partido Volya, del empresario Mareshki, no será socio de coalición en el Ejecutivo. Desde el GERB declaran, sin embargo, que será bienvenido un apoyo complementario en el Parlamento. Las consultas entre los expertos apuntan a que los programas electorales del partido GERB y de los “Patriotas Unidos” sean refundidos en un programa de gestión común. Las prioridades respecto a las cuales el GERB asegura que no dará marcha atrás y que resultarán primordiales ya desde el primer día de gobierno son la lucha contra la burocracia y la corrupción, la reforma de la Justicia, la Educación, la delincuencia común. Durante la semana uno de los copresidentes de los “Patriotas Unidos”, Krasimir Karakachanov, revelaba ante Radio Nacional de Bulgaria que en torno a la delincuencia común existe un consenso absoluto y ya se han trazado medidas, y que en lo tocante a un aumento de las pensiones, respecto al cual el GERB recela, se buscaría un compromiso. También persisten las discrepancias en torno al tema de la implementación de un sistema electoral mayoritario al que el GERB se aferra pero los “Patriotas Unidos” se oponen. No obstante ello, según Karakachanov, estas distinciones no son capaces de frenar las conversaciones sobre un gobierno común. Los asuntos pendientes relacionados con el programa de gobierno no permiten que a esta etapa se pacten la composición ni el reparto de las responsabilidades en el gabinete de coalición. Mientras tanto, en el transcurso de la semana trascendió que el presidente de Bulgaria, Rumen Radev, probablemente convoque la nueva Legislatura después de las Pascuas de Resurrección algo que aporta nueva claridad a la perspectiva de nuevo gobierno. Por Constitución el jefe de Estado entrega mandato para la formación de un nuevo gobierno, primero, al partido ganador de las elecciones y, de concluir el mandato con éxito, sugiere al Parlamento que elija al candidato a primer ministro. Luego, los diputados deberán votar también a los integrantes y la estructura del Consejo de Ministros. En el seno del partido GERB priman las expectativas de que el gobierno presidido por éste sea elegido hasta finales de abril.

Versión en español por Mijail Mijailov